Parar!

Odio que me trates como una niña como si no fuera lo suficientemente consciente de lo que hago bien y mal. No vengas a joderme la existencia diciéndome lo que tengo que hacer, sé de sobra lo que tengo que hacer. Si necesito tu ayuda tranquila te pediré ayuda pero para ya de joderme, de hacerme llorar. Parar de hecharme en cara que es lo que hago mal, en que me equivoco, en que fallo...  NO SOY PERFECTA!  Parar de hacerme sentir mal porque al final desearé quedarme sola en un mundo que parece que no tiene compasión.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Fruto de la herida

Todo...

Madrid me mata