Quien.

Pocos llegan a la verdad. Quienes lo consiguen, tienen que callar porque no todos deseamos saber la verdad, preferimos refugiarnos en lo justo, en lo normal, en lo ordinario y en lo necesario.
La verdad propia la conoce una mismo. Si miente más que habla, lleva un gran tormento a su espalda. Quien grita por causa de un peligro interior, la razón solo es conocida por el portavoz. Quien es valiente para decir lo que siente, su verdad, es quien merece una nueva novedad. Quien pide perdón y perdona por las faltas propias y ajenas, es quien se ha ganado el cielo a pulso. Quien olvida para no refugiarse en un recuerdo, es aquel de corazón recto. Quien madruga, descubre las maravillas creadas por el Creador. Quien tiene principios, sigue unas metas que no todos saben cumplir. Quien traiciona es quien sufrirá en sus carnes la traición. Quien promete y no cumple, deseará no haber existido. Quien vive y decide seguir haciéndolo hasta el final, es más sabio que cualquiera de los demás. Quien lucha y se vuelve temerario, nunca se arrepentirá de nada de lo que ha hecho. Quien escucha, es capaz de sufrir el mal ajeno. Quien observa  comprende y detalla lo que nos inquieta por las entrañas. Quien encuentre ese amor eterno, aquel que perdura hasta el final de los tiempos, será feliz hasta su último aliento.

Posdata: Actitudes que no todos llegan a conseguir.

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