Cartas.

Perdóname porque no estoy allí contigo para darte un abrazo.

¡Hola! ¿Cómo estás? Aquí todo muy tranquilo. Ya sabes cómo es Madrid en verano... Sí, demasiado caluroso. Aunque este verano está siendo un poco más frío de lo normal, bueno eso dicen los del tiempo. Ya los conoces... En realidad, quería decirte que hoy he pasado un día de perros. No sé qué me pasa o qué le pasa a los demás conmigo. Me viene a la mente que si hubiese actuado de otra manera no estaría aquí escribiéndote sobre lo que pienso. La verdad es que hoy es uno de esos días en los que me siento como una auténtica mierda. El motivo no lo sé. Creo que son demasiadas cosas. Creo que estoy estresada porque he callado y estoy aguantando mucho. Sabía que, en verano, mi vida no hace más que complicarse. Sé que el verano está para descansar pero parece que este año todo ha sido trabajo y estudio. Tenía planes para querer pasar unos meses atareada y entretenida, pero sin perder el tiempo. Me parece que me he hecho demasiadas ilusiones y que, este año, las moscas han sido aficionadas a rondarme. Me siento mal conmigo misma, por eso puede que me revele contra el mundo por haberme hecho cambiar. No soy la misma del verano anterior. Soy mucho más segura e insegura con el mundo y con mi mundo. Soy joven, pero creo que me merecía que me pasaran cosas buenas. Ya sabes como irme de vacaciones al extranjero, como estar con los amigos riendo y planificando planes, como irme a algún lugar con una buena amiga. No sé porque busco irme. Es como si quisiera desaparecer durante mucho tiempo. Mi vida solo acaba de comenzar y quiero, no sé, ser yo misma sin miedo a que me juzguen o a que me odien. Algo malo de mí es que una vez que me voy, vuelvo diferente, distinta. Sé que hoy es un día malo pero amiga mía sabes lo que necesitas... Así que hazlo de una vez.

Gracias, tú.

Saludos,
               Una joven en busca de sentido.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Fruto de la herida

Todo...

Madrid me mata